La correa del reloj es de piel

El cuidado y las pruebas que dedicamos a las correas de piel de los relojes Cartier garantizan su máxima calidad, lo que permite que en condiciones normales de uso duren una media de veinticuatro meses. Sin embargo, el contacto con el agua o cualquier otro líquido puede provocar el desgaste de la correa.

Se recomienda el cambio de la correa de piel del reloj en un servicio posventa aprobado por Cartier. El servicio propondrá modelos perfectamente adaptados a la caja del reloj, equipados con hebillas o cierres desplegables ajustables con certificado de autenticidad.